martes, 21 de mayo de 2013

Educación, comunicación y sexismo

Los medios de comunicación nos influyen constantemente y hacen que actuemos de una determinada manera, y es que la información que recibimos a través de los medios es procesada previamente, los temas más relevantes no están ahí porque sí, han sido seleccionados y  reinterpretados con anterioridad y de una forma u otra están presentes en nuestra educación.
Es por eso que los estudiantes de comunicación deberían ser enseñados a ser profesionales con criterio, lo que implica un alto esfuerzo personal y sentido crítico, porque cada persona viene de un entorno determinado y está influenciada por factores que lo condicionan.
 
Uno de los problemas más grandes a los que nos enfrentamos en la actualidad refiriéndonos a la educación en los medios de comunicación, es el inminente sexismo del que estamos rodeados. Aparentemente estamos en una sociedad igualitaria donde tanto hombres como mujeres gozan de los mismos derechos y son tratados por igual, pero nada más lejos de la realidad.
Cuando analizamos un anuncio, leemos algún artículo o bien vemos el telediario, si miramos más allá e interpretamos lo que realmente nos quieren decir, nos daremos cuenta de que la mujer es tratada de forma distinta a la del hombre, por ejemplo en los spots publicitarios existen varios cánones establecidos de prototipos de mujer, y de ahí no salen, sin embargo los hombres salen representados de todas las maneras imaginadas y por imaginar, ¿Por qué esto es así? Cada persona es distinta y especial a su manera, entonces ¿Por qué en los medios quieren reflejar a personas inexistentes y con un comportamiento homogéneo? Todo carece de sentido, y esto deberían saberlo las personas que son profesionales de la comunicación, porque los ciudadanos tenemos el derecho de estar informados ya que la información es el más valioso de los tesoros, y esta tiene que ser objetiva y veraz además que debe ser tratada con unos registros apropiados. Por estas y otras muchas razones, desde las universidades deberían fomentar el pensamiento crítico, el respeto y hacer que mediante clases teóricas, mesas redondas y trabajos independientes, los futuros transmisores de la información sean capaces de ver por si mismos la realidad social, porque ellos son los futuros educadores, y como ya expresaba Ferrés, en su artículo la educación como industria del deseo, los medios de comunicación tienen más poder de convicción que los docentes de los colegios y otros centros de formación. 
 
Y es que como nadie es más que nadie, como no hay razas superiores, como todos tenemos los mismos derechos, también pedimos ser tratados por igual, no es cuestión de ideología, es cuestión de convivir pacíficamente en sociedad, porque no somos depredadores, somos personas con derecho a vivir y a ser tratadas por igual en todos los ámbitos de la vida, y si estos valores no se fomentan en las aulas, tendremos unos medios de comunicación corruptos. Por otra parte, gracias a las redes sociales y a la web 2.0, la información que le llega a los ciudadanos cada vez es más eficaz, detallada y rápida de la que nos llega desde ciertos medios, pero tampoco podemos confundir los términos periodista profesional, que está dotado de unos conocimientos académicos sobre el tratamiento de la información a los periodistas ciudadanos que en ocasiones hacen divulgaciones o la información carece de sentido.
 
Reseña basada en el artículo: El periodismo especializado en la educación desde la perspectiva de género, de Eva Navarro y Queli Fueyo.

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